Lavado a presión

Boquillas de pulverización para lavado a presión

Limpieza de alto impacto para vehículos, instalaciones e industria pesada. Las boquillas NozzlePro convierten la presión de la bomba en una limpieza potente y eficiente, reduciendo el consumo de agua y prolongando la vida útil de los equipos.

Nuestras recomendaciones

Soluciones óptimas para aplicaciones de lavado a presión

Ajuste el caudal (GPM), la presión (PSI) y el ángulo de pulverización a la superficie, la carga de suciedad y la distancia de seguridad. Desde un enjuague ligero hasta un desengrasado intenso, nuestras boquillas proporcionan el impacto deseado con menos agua.

Limpieza de equipos industriales

Elimine la grasa, los aceites y los residuos incrustados en tuberías, bastidores y carcasas.

  • Ventilador plano: cobertura de gran angular para lavado general
  • Consejos de flujo sólido: impacto preciso para depósitos difíciles (disponible en Alta Presión )
  • Rotativo/Turbo: los chorros giratorios combinan impacto y cobertura para una limpieza más rápida.

Beneficios: Limpieza más rápida · Menor uso de productos químicos · Menos tiempo de inactividad

Lavado a presión de flotas y vehículos

Mantenga limpios los camiones, autobuses y flotas municipales por seguridad y para cumplir con la normativa.

  • Tren de rodaje: colectores con ventiladores planos de gran volumen
  • Ruedas/Neumáticos: chorros de alta presión para eliminar el polvo de frenos y la suciedad.
  • Enjuague corporal: cono hueco o abanico ancho para un secado suave sobre superficies pintadas

Beneficios: Aspecto limpio · Control de la corrosión · Menor tiempo de mantenimiento

Limpieza de instalaciones y pisos

Mantenga pisos y paredes seguros e higiénicos en almacenes, plantas y garajes.

  • Boquillas rotativas: cobertura uniforme de grandes superficies de hormigón
  • Ventiladores planos: flujo laminar uniforme para un enjuague completo.
  • Consejos de TC Wear: larga vida útil en condiciones abrasivas

Beneficios: Mayor seguridad al caminar · Menos resbalones · Zonas de trabajo más limpias

Instalaciones de alimentos y bebidas

Apoyar los programas de saneamiento en cervecerías, lecherías y áreas de envasado.

  • Ventiladores planos de acero inoxidable: lavado higiénico de equipos/áreas
  • Limpieza rotativa/CIP: limpieza de tanques y recipientes para reducir la entrada manual
  • Desinfección: combinar con boquillas de desinfección para una cobertura posterior al lavado.

Beneficios: Cumplimiento · Higiene · Cambios de producto más cortos

¿Por qué elegir NozzlePro para el lavado a presión?

Alto impacto

Los orificios y ángulos optimizados transforman la presión (PSI) en fuerza de limpieza.

Durabilidad

Las opciones de acero inoxidable y carburo de tungsteno resisten la abrasión y los productos químicos.

Eficiencia

Los patrones de tamaño adecuado reducen el consumo de agua, energía y productos químicos.

Flexibilidad

Boquillas para varillas manuales, pórticos, robots y colectores fijos.

Especifique el caudal (PSI/GPM), la distancia de separación y el tipo de suelo de su bomba; nosotros dimensionaremos el juego de boquillas según su ciclo de trabajo.


Hable con un ingeniero de ventas

¿Necesitas ayuda para ajustar el ángulo y el caudal de pulverización a tu hidrolavadora? Te recomendaremos las boquillas adecuadas para la curva de tu bomba y las superficies a limpiar.

¿Qué ángulo de boquilla es el mejor para el lavado a presión?
Los abanicos planos de 15° a 25° ofrecen un alto impacto para suciedad incrustada; los de 40° a 65° proporcionan una cobertura más amplia para el enjuague y superficies delicadas. Reduzca la distancia de separación para aumentar el impacto.
¿Cómo puedo prolongar la vida útil de la boquilla?
Añada filtros, purgue las tuberías antes de usar y considere el uso de puntas de carburo de tungsteno en aplicaciones abrasivas. Reemplace la boquilla cuando el caudal se desvíe más del 10 % de la especificación.
Ventilador rotativo/turbo frente a ventilador plano: ¿cuándo usar cada uno?
El sistema rotatorio/turbo hace girar un chorro para una cobertura más rápida y un mayor impacto, ideal para suciedad incrustada en hormigón/acero. El abanico plano proporciona chorros uniformes y controlables para el lavado y enjuague general.

Ya tienes una hidrolavadora, pero ¿le estás sacando el máximo provecho? Todo depende de la boquilla. Elegir la boquilla adecuada puede parecer complicado con tantos colores y números, pero no lo es tanto. Usar la incorrecta puede significar perder mucho tiempo o incluso dañar lo que estás limpiando. Veamos qué boquilla es la mejor para tu próximo proyecto de limpieza.

Conclusiones clave

  • El color de la boquilla de lavado a presión indica el ángulo de pulverización: el rojo es un chorro estrecho de 0 grados para trabajos difíciles, mientras que el blanco es un abanico ancho de 40 grados para un enjuague suave.
  • Las boquillas especiales, como la negra para jabón o la boquilla turbo giratoria, ofrecen capacidades de limpieza únicas para tareas específicas.
  • Siempre utilice la boquilla de la hidrolavadora adecuada para el material de la superficie; el concreto puede soportar chorros más fuertes, pero la madera o el revestimiento necesitan chorros más suaves.
  • Es importante comprender la presión (PSI, libras por pulgada cuadrada) de su hidrolavadora y boquilla para limpiar eficazmente sin causar daños.
  • Comience con una boquilla de ángulo de pulverización más amplio y cambie a una más focalizada solo si es necesario para evitar dañar las superficies.
Un trabajador está lavando un techo a presión.

Comprensión de los códigos de color de las boquillas de lavado a presión

Las boquillas de las hidrolavadoras pueden parecer simples accesorios, pero en realidad tienen un código de color que indica el patrón de rociado y la intensidad del chorro de agua. Comprender este código de color es fundamental para usar la hidrolavadora de forma eficaz y segura. Usar la boquilla incorrecta puede dañar las superficies o provocar una limpieza ineficiente. Analicemos los colores de boquilla más comunes y para qué se utilizan.

La boquilla roja de 0 grados: Potencia concentrada

La boquilla roja es la más agresiva de las boquillas estándar para hidrolavadoras. Ofrece un chorro de 0 grados, lo que significa que el agua se concentra en un único y potente chorro. Esta boquilla está diseñada para eliminar manchas y suciedad extremadamente difíciles, como grafitis del hormigón o pintura del metal. Sin embargo, debido a su intensidad, la boquilla roja debe usarse con extrema precaución. Puede dañar fácilmente superficies blandas como madera, revestimientos o incluso asfalto. Es mejor probarla primero en una zona poco visible. Considérela como último recurso para problemas persistentes.

Boquilla amarilla de 15 grados: Limpieza intensiva

La boquilla amarilla ofrece un patrón de rociado de 15 grados, con una intensidad menor que la de la boquilla roja, pero que aún proporciona una limpieza eficaz. Esta boquilla es ideal para tareas como eliminar suciedad, moho y hongos de superficies como hormigón, ladrillo y algunos tipos de revestimiento. Es más fácil de usar que la boquilla roja, pero aun así hay que tener cuidado, especialmente con materiales delicados. Mantenga siempre una distancia de seguridad y pruebe la boquilla en una pequeña área antes de limpiar toda la superficie. Es una buena opción para trabajos de limpieza más exigentes que requieren algo más que un simple enjuague.

Boquilla verde de 25 grados: Limpieza de uso general

La boquilla verde es la ideal para tareas de limpieza generales. Su patrón de rociado de 25 grados ofrece un buen equilibrio entre potencia de limpieza y cobertura de superficies. Esta boquilla es perfecta para lavar autos, limpiar terrazas y eliminar la suciedad y los residuos de aceras y entradas de vehículos. Es lo suficientemente suave para usarla en la mayoría de las superficies sin dañarlas, pero a la vez lo suficientemente eficaz para realizar el trabajo. Si no está seguro de qué boquilla usar, la verde suele ser una buena opción para empezar. Es una opción versátil para una amplia gama de aplicaciones de limpieza.

Boquilla blanca de 40 grados: Enjuague suave

La boquilla blanca es la más suave de las boquillas estándar para hidrolavadoras. Ofrece un chorro amplio de 40 grados, ideal para enjuagar y limpiar superficies delicadas. Esta boquilla es perfecta para lavar ventanas, enjuagar autos después del lavado y limpiar superficies delicadas como revestimientos pintados o barcos. Proporciona una amplia cobertura, lo que ayuda a prevenir marcas y garantiza una limpieza más uniforme. Si le preocupa dañar una superficie, la boquilla blanca es la opción más segura. Está diseñada para tareas que requieren un trato delicado y un enjuague completo.

Usar la boquilla correcta no solo protege las superficies, sino que también optimiza la eficacia de la limpieza. Entender los códigos de color es una forma sencilla de asegurarse de usar la herramienta adecuada para cada tarea.

Aquí tienes una tabla de referencia rápida:

Color de la boquilla

Ángulo de pulverización

Usos comunes

Rojo

0 grados

Manchas difíciles, eliminación de pintura (usar con precaución)

Amarillo

15 grados

Eliminación de suciedad, moho y hongos

Verde

25 grados

Limpieza general, lavado de coches, terrazas

Blanco

40 grados

Enjuague, ventanas, superficies delicadas

Boquillas especiales para hidrolavadoras para tareas específicas

Además de los accesorios estándar con código de color, existen boquillas especializadas diseñadas para tareas de limpieza específicas, a menudo más exigentes. No se trata de pulverizadores comunes; están diseñados para tareas particulares que requieren un enfoque diferente. Utilizar la boquilla especializada adecuada puede marcar una gran diferencia en la eficiencia y la eficacia del trabajo, especialmente cuando se trata de limpieza industrial a presión o limpieza a presión de alta exigencia.

Boquilla negra: Aplicación de detergente

La boquilla negra es la ideal para aplicar soluciones de limpieza. Está diseñada para funcionar con el tubo de sifón de detergente de tu hidrolavadora. Esta boquilla suele tener un patrón de rociado más amplio y funciona a menor presión. Esto es importante porque permite que el detergente se adhiera a la superficie en lugar de atomizarse en una fina niebla. Considéralo como el paso previo al lavado en tu proceso de limpieza. Ayuda a recubrir uniformemente las superficies con jabón o cera, facilitando mucho la limpieza posterior. Estas boquillas para hidrolavadoras se consideran duraderas porque están fabricadas para soportar productos químicos.

Boquilla giratoria: Mayor poder de limpieza

A menudo llamada boquilla turbo, esta boquilla es revolucionaria para la suciedad más incrustada. Hace girar el chorro de agua en un movimiento circular, creando un potente rociado cónico. Esto combina el impacto de un chorro fino con la cobertura de uno más amplio. Puede reducir significativamente el tiempo de limpieza, especialmente en superficies duras como el hormigón o el ladrillo. Sin embargo, debido a su intensidad, no es adecuada para materiales delicados. Es un excelente ejemplo de cómo las boquillas de alta presión se pueden optimizar para desafíos específicos.

Boquilla química de largo alcance: Alcance en zonas elevadas

Cuando se necesita aplicar detergentes o soluciones de limpieza en zonas de difícil acceso, como el segundo piso de un edificio o paredes altas, la boquilla química de largo alcance es la solución. Estas boquillas están diseñadas para proyectar la solución de limpieza mucho más lejos que las boquillas estándar. Esto permite aplicar productos químicos de forma segura desde el suelo, evitando el uso de escaleras y reduciendo riesgos. Son una opción práctica para el lavado a presión de instalaciones donde la limpieza en altura es habitual. Estas boquillas suelen ser resistentes a la corrosión y están fabricadas para soportar diversas aplicaciones químicas.

Elegir la boquilla especializada adecuada significa que no solo estás eliminando la suciedad, sino que estás aplicando la fuerza o la solución correcta para el problema específico en cuestión. Se trata de precisión y eficiencia, lo que facilita las tareas más difíciles.

Selección de las boquillas de lavado a presión adecuadas para las superficies a limpiar

Elegir la boquilla adecuada para la hidrolavadora no se trata solo de eliminar la suciedad; se trata de ajustar el patrón de rociado y la presión a la superficie que se está limpiando. Usar la boquilla incorrecta puede provocar daños, pérdida de tiempo y un resultado deficiente. Es como usar la herramienta correcta para cada tarea: un destornillador para un tornillo, no un martillo. Analicemos qué boquillas funcionan mejor para diferentes superficies.

Limpieza a presión de un camino de entrada empedrado

Boquillas para hormigón y entradas de vehículos

El hormigón y los caminos de entrada son resistentes, pero aun así requieren el método adecuado. Para la limpieza general, las boquillas de 25 grados (verde) y 40 grados (blanca) son buenas opciones. La boquilla de 25 grados ofrece un buen equilibrio entre potencia y cobertura, mientras que la de 40 grados es más suave para la suciedad ligera. Si se trata de manchas difíciles, puede considerar una boquilla de 15 grados (amarilla), pero úsela con precaución para evitar dañar el hormigón. Comience siempre con la boquilla de ángulo más amplio y, si es necesario, vaya reduciendo el chorro gradualmente. Una boquilla giratoria también puede ser eficaz para el hormigón, ya que combina la potencia de un chorro estrecho con una mayor cobertura. Estas boquillas son excelentes para eliminar la suciedad incrustada en sus sistemas de lavado a presión comerciales.

Boquillas para terrazas y vallas de madera

Las superficies de madera, como terrazas y cercas, son más delicadas que el concreto. Para estas, conviene usar boquillas de ángulo amplio para distribuir la presión. La boquilla de 40 grados (blanca) suele ser la mejor opción. Proporciona un enjuague suave que elimina la suciedad y el moho sin dañar la veta de la madera. También puede usar la boquilla de 25 grados (verde) para manchas un poco más difíciles, pero siempre pruébela primero en una zona poco visible. Evite las boquillas de 0 grados (roja) y 15 grados (amarilla) en madera, ya que pueden dañarla o astillarla fácilmente. Al limpiar madera, considere usar boquillas de hidrolavadora Fleet que ofrecen un trato más delicado.

Boquillas para superficies delicadas

Al limpiar materiales delicados, como pintura de automóviles, revestimiento de vinilo o muebles de exterior, es fundamental extremar las precauciones. La boquilla de 40 grados (blanca) es la herramienta principal para estas tareas. Crea un amplio abanico de chorro que distribuye la presión del agua sobre una mayor superficie, minimizando el riesgo de daños. Para limpiezas o enjuagues muy ligeros, puede considerar una boquilla de 65 grados si su hidrolavadora la incluye. Lo esencial es utilizar la presión efectiva más baja posible. Para tareas como la limpieza de talleres mecánicos, la precisión es crucial, y la boquilla adecuada marca la diferencia. Recuerde que comenzar con un ángulo amplio y una presión baja siempre es la opción más segura al trabajar con superficies delicadas.

Aquí tienes una guía rápida para ayudarte a elegir las boquillas adecuadas para cada superficie:

  • Hormigón y entradas de vehículos: 15 grados (amarillo), 25 grados (verde), 40 grados (blanco), boquilla giratoria
  • Terrazas y cercas de madera: 25 grados (verde) - usar con precaución, 40 grados (blanco)
  • Revestimientos, automóviles y superficies delicadas: 40 grados (blanco), 65 grados (si está disponible)

Siempre pruebe la boquilla elegida en una zona pequeña y poco visible antes de usarla en la superficie principal. Esto le ayudará a calibrar la presión y a evitar daños accidentales. Es un paso sencillo que puede ahorrarle muchos problemas, sobre todo al usar boquillas de limpieza industrial por primera vez en un material nuevo.

Utilizar la boquilla correcta es fundamental para una limpieza eficaz, ya sea en una entrada de garaje, una valla de madera o un coche. Se trata de proteger sus bienes mientras los limpia. Para trabajos difíciles en hormigón, puede que se necesite un chorro más concentrado, pero para materiales más blandos, lo mejor es un rociado más amplio y suave. Esta cuidadosa selección también es vital para las soluciones de lavado a presión de maquinaria, donde la precisión es crucial.

La importancia de la presión (PSI) de la boquilla de lavado a presión

Es fácil pasar por alto la importancia de la presión (PSI, libras por pulgada cuadrada) al elegir una boquilla para hidrolavadora, pero es un factor crucial. La presión de la boquilla influye directamente en su potencia de limpieza y en el riesgo de dañar la superficie. Usar una boquilla con una presión demasiado alta puede ocasionar reparaciones costosas, mientras que usar una con una presión demasiado baja puede resultar en un trabajo deficiente. Analicemos por qué la presión es importante y cómo elegir la adecuada.

Comprensión de las clasificaciones de presión

Cada hidrolavadora tiene una presión máxima (PSI) que puede generar, y cada boquilla está diseñada para un rango de presión específico. El tamaño del orificio de la boquilla determina el caudal de agua y, por consiguiente, la presión ejercida sobre la superficie. Las boquillas con orificios más pequeños crean un chorro más concentrado y a alta presión, mientras que los orificios más grandes producen un rocío más amplio y a menor presión. Es importante que la presión (PSI) de la boquilla sea compatible con la hidrolavadora y la superficie que se va a limpiar. Por ejemplo, usar una boquilla de 3000 PSI en una máquina que genera 4000 PSI puede dañar la boquilla y, potencialmente, la propia hidrolavadora. Para tareas como el lavado a presión de camiones y autobuses, es necesario tener en cuenta la presión (PSI) para evitar dañar la pintura.

Prevención de daños en la superficie

Uno de los mayores riesgos de ignorar la presión (PSI) es el daño a la superficie. Usar una boquilla de alta presión en una superficie delicada como la madera o el revestimiento puede rayar, astillar o arruinar el material. Cada superficie requiere un nivel de presión diferente para limpiarse eficazmente sin dañarla. Aquí tienes una guía rápida:

  • Hormigón: Puede soportar altas presiones (2500-3000+ PSI)
  • Madera: Requiere una presión menor (500-1500 PSI)
  • Vehículos: Requiere limpieza suave (1500-2000 PSI)
  • Revestimiento exterior: Debe limpiarse con baja presión (500-1000 PSI).

Comience siempre con una boquilla de baja presión y auméntela gradualmente hasta lograr el resultado de limpieza deseado. Pruebe primero en una zona poco visible para asegurarse de no causar ningún daño.

Elegir la presión adecuada (PSI) no solo previene daños, sino que también optimiza la eficacia de la limpieza. Usar una presión demasiado baja implica dedicar más tiempo y esfuerzo del necesario a limpiar una superficie. Por otro lado, usar una presión demasiado alta puede ser un desperdicio y causar daños sin mejorar significativamente el poder de limpieza. El objetivo es encontrar el punto óptimo donde se utiliza la presión justa para eliminar la suciedad y la mugre eficazmente, sin excederse.

Ajuste la presión de la boquilla a la de su máquina.

Optimizar la eficacia de la limpieza significa encontrar el punto justo de presión para eliminar la suciedad y la mugre de forma efectiva, sin excederse. Tenga en cuenta estos factores:

  • Tipo de suciedad/mancha: Las manchas difíciles requieren mayor presión.
  • Material de la superficie: Las superficies duraderas pueden soportar mayor presión.
  • Tipo de boquilla: Las diferentes boquillas distribuyen la presión de manera diferente.

Al comprender y gestionar cuidadosamente la presión (PSI), puede asegurarse de obtener el máximo rendimiento de su hidrolavadora y proteger las superficies. Recuerde consultar siempre el manual de la hidrolavadora y las especificaciones de la boquilla antes de comenzar cualquier tarea de limpieza. Incluso podría considerar un sistema de boquillas de conexión rápida para facilitar el cambio entre diferentes presiones (PSI), lo cual es especialmente útil para diversas tareas, como el lavado a presión de vehículos .

Elegir la boquilla de lavado a presión adecuada para obtener resultados óptimos

Elegir la boquilla adecuada para la hidrolavadora se trata de usar la herramienta correcta para cada tarea. No se trata solo de eliminar la suciedad, sino de hacerlo eficazmente y sin causar daños. Es como usar el destornillador correcto para un tornillo: uno incorrecto no funcionará bien e incluso podría dañar la cabeza. Al elegir la boquilla adecuada, no solo limpias mejor, sino que también prolongas la vida útil de tu equipo de hidrolavado y ahorras agua, lo cual es ideal para soluciones de hidrolavado energéticamente eficientes.

Considere el material de la superficie

Cada superficie tiene sus límites de resistencia. Los caminos de concreto son muy resistentes, así que para manchas difíciles, conviene usar una boquilla más precisa, como la amarilla de 15 grados. Pero si estás limpiando una terraza de madera o revestimiento de vinilo, debes ser mucho más delicado. Para estos casos, la boquilla blanca de 40 grados suele ser la mejor opción. Esta distribuye el agua sobre una superficie más amplia, reduciendo el impacto. Usar una boquilla demasiado agresiva en una superficie blanda puede provocar marcas, astilladuras o incluso desgarros. Siempre es mejor empezar con un ángulo más amplio y ver si funciona antes de usar un chorro más concentrado.

Evaluar el tipo de suciedad

¿Qué tipo de suciedad tienes? ¿Es solo polvo y polen, o barro, grasa o moho incrustados? Para suciedad ligera, un chorro más amplio, como el de la boquilla verde de 25 grados, suele ser suficiente. Cubre más superficie y es menos probable que cause problemas. Sin embargo, si te enfrentas a suciedad incrustada o manchas de aceite, quizás necesites usar un chorro más estrecho, como el de la boquilla amarilla de 15 grados o incluso el de la roja de 0 grados para las manchas más difíciles. Recuerda mantener la boquilla roja en movimiento constante y a una distancia segura para evitar dañar la superficie.

Comienza con ángulos más amplios

Esta es una buena regla general para casi cualquier tarea de limpieza. En caso de duda, comience siempre con la boquilla de ángulo más amplio que tenga, normalmente la blanca de 40 grados. Observe su eficacia de limpieza. Si no elimina la suciedad por completo, puede cambiar a una boquilla con un chorro ligeramente más concentrado, como la verde de 25 grados. Este método paso a paso le ayuda a encontrar el punto óptimo para una limpieza eficaz sin riesgo de dañar la superficie. Es una forma mucho más segura de trabajar y, a menudo, igual de eficiente, sobre todo si desconoce la resistencia de la superficie. Este método es clave para obtener excelentes resultados y mantener la integridad de sus superficies.

Finalizando su lavado a presión

Elegir la boquilla adecuada para tu hidrolavadora marca la diferencia. Puede reducir considerablemente el tiempo de limpieza y mejorar el rendimiento general de la máquina. De hecho, con solo cambiar la boquilla, una hidrolavadora común se convierte en una herramienta de limpieza muy potente. Es increíble cómo una pieza tan pequeña puede cambiarlo todo. Recuerda elegir la boquilla adecuada para la superficie que estás limpiando y, en caso de duda, empieza con un chorro más amplio. ¡Que disfrutes la limpieza!

Preguntas frecuentes

¿Qué significan los colores de las boquillas de las hidrolavadoras?

Las boquillas de la hidrolavadora son como diferentes pulverizadores para tu máquina de limpieza. Tienen puntas de distintos colores que indican cómo se proyecta el agua. Una boquilla roja proyecta un chorro fino y potente, mientras que una blanca proyecta un abanico amplio y suave. Elegir el color adecuado te ayuda a limpiar mejor y a no dañar la superficie.

¿Cuándo debo usar las boquillas rojas o amarillas?

Considera las boquillas roja (0 grados) y amarilla (15 grados) como las más resistentes. Rocían agua con mucha fuerza y ​​precisión, ideales para eliminar suciedad incrustada, pintura vieja o manchas difíciles en superficies como el hormigón. Sin embargo, hay que tener cuidado al usarlas, ya que pueden dañar fácilmente materiales más blandos.

¿Para qué son más adecuadas las boquillas verdes y blancas?

La boquilla verde (25 grados) es muy versátil. Su chorro es más amplio que el de las boquillas roja y amarilla, lo que la hace ideal para limpiar la mayoría de las superficies, como coches, terrazas o aceras, sin ser demasiado agresiva. La boquilla blanca (40 grados) es aún más suave, con un chorro muy amplio, perfecta para enjuagar o limpiar superficies delicadas como ventanas o revestimientos pintados.

¿Existen boquillas especiales para sustancias como el jabón o la suciedad muy incrustada?

Sí, ¡hay boquillas especiales para tareas específicas! La boquilla negra sirve para aplicar jabón o detergente en las superficies antes de lavarlas. También hay una boquilla giratoria que hace girar el agua a gran velocidad, lo que limpia la suciedad más incrustada rápidamente, pero hay que tener cuidado de no dañar los materiales más delicados.

¿Por qué es importante la presión (PSI) al elegir una boquilla?

PSI significa «libras por pulgada cuadrada» e indica la fuerza con la que sale el agua a presión. Usar una boquilla con una presión demasiado alta en una superficie que no la soporta, como la madera blanda, puede causar daños como arañazos o astillas. Comprueba siempre la presión máxima (PSI) de tu hidrolavadora y elige una boquilla adecuada para la superficie que vas a limpiar.

¿Cuál es la mejor manera de empezar a limpiar si no estoy seguro de qué boquilla usar?

Cuando no estés seguro, lo mejor es empezar con el ángulo de pulverización más amplio, normalmente la boquilla blanca (40 grados). Si no limpia lo suficiente, puedes probar con una más estrecha, como la verde (25 grados). De esta forma, empiezas con suavidad y solo usas más potencia si es realmente necesario, lo que ayuda a evitar accidentes.